La tecnología educativa no nace con el uso de la computadora en el aula. Una mirada nostálgica al uso del pizarrón y la tiza nos permite reencontrar la trascendencia de la tarea docente y la convicción de que no hay recurso, por eficiente que sea, que reemplace la mirada, la voz y los sueños de los maestros.
Siempre vieron mi fondo negro. Alguien sugirió que si me pintaban de verde, la vista de los alumnos estaría más descansada. Tal vez. Las tizas me recorrieron siempre hasta lo que la altura de los docentes lo permitía. De tantos cálculos combinados y análisis sintácticos escritos en mi piel rugosa queda sólo el polvo blanco que el borrador dejaba caer en cada cambio de hora. El maestro que se atrevía a dibujarme un paisaje, con todos los detalles y las tizas de color de que disponía, encendía siempre los ojos de los más chicos. Ecuaciones, abecedarios y reglas ortográficas. Poesías, oraciones unimembres y cuadros sinópticos. La tabla del 7, las regiones geográficas y los problemas de regla de tres simple. Cada hora un tatuaje distinto sobre mi piel rugosa. Fecha y fechas. Números de ejercicios y "Hoy es un día nublado" con la cara aburrida de un sol casi tapado por un nubarrón gordo.
Siempre listo y en silencio. ¿Quién más que yo supo la intimidad de cada clase? Alumnos preferidos y denigrados. Preguntas curiosas. Gestos casi heroicos en el ejercicio de la docencia. Pero también vi alumnos humillados y muchos llantos en un rincón escondido de¡ aula. Risas. Promesas de un año lectivo intenso y aprovechado al máximo. Objetivos perfectamente logrados. Otros años vi los mismos ejercicios de¡ año anterior copiados de la misma carpeta didáctica con la misma cara de aburrimiento. Muchachas jóvenes ensayaron sus letras de maestra con pulso tembloroso y animado a la vez. Buscaban la caligrafía que sólo les daba mi amplia superficie. "¿Por qué todos los maestros tienen la misma letra en los pizarrones?", preguntó alguna vez un petiso de flequillo rebelde sin lograr una respuesta convincente de su maestra. Yo tampoco la tenía.
¿Debo decir que mi nombre proviene de una familia de prosapia relacionada con la geología? ¿La geología? Sí, señor.
Algunos dicen que la palabra pizarra proviene del latín fissus: hendido, abierto y otros comentan que viene del vasco (pizarri). Atribuyen la primera etimología al hecho de que las pizarras suelen encontrarse en suelos trastornados donde forman capas que alternan, en general, con lechos de gres. Encierran con frecuencia gran cantidad de restos orgánicos fósiles. Resisten al aplastamiento, a los agentes atmosféricos, al fuego de los humos ácidos, al aire marino. A fines del siglo pasado el Diccionario Enciclopédico Hispano Americano de Literatura, Artes y ciencias, editado en Barcelona en 1894, decía que la pizarra, entre otras varias acepciones era un "trozo de este tipo de roca oscura algo pulimentado, de forma rectangular y ordinariamente con marco de madera, en que se escribe o dibuja con yeso o lápiz blanco". El pizarrín, por otra parte, era una barrita de lápiz o de pizarra que se usaba para escribir o dibujar en las pizarras de piedra.Su prima hermana, la tiza, mi socia inquebrantable, era ya en el siglo pasado sinónimo de escritura y magisterio: en las academias y escuelas se le daba la función de "lapicero", es decir, el de elemento de escritura sobre superficies más amplias que el de la hoja del estudiante. Se le solía llamar también "Clarión". Las condiciones que se exigían a la tiza o clarión, que en aquella época se elaboraban con procedimientos cuasi artesanales, eran "que se borre fácilmente y que a pesar de esto tenga la suficiente consistencia para poder escribir con ella, que señale bien sin hacer esfuerzo alguno y sin arañar el encerado ... " (¿Pasarán muchas tizas de hoy en día estas pruebas de calidad?) Para conseguir estas propiedades debía estar "exenta de arenilla y caliches". Se preparaba el polvo con tierra arcillosa blanca, mezclada con distintos minerales de los que no podía faltar el yeso. Una vez preparada se podía ya amasar con agua hasta formar un barro espeso con el que se hacían las barritas. Lo mío es menos erudito y mucho menos geológico. Me llaman pizarrón, por lo general, en las Antillas, en Argentina, Uruguay y Venezuela. Me dicen también "encerado" y soy a menudo un cuadro encerado (aunque no lo crean, en algunas partes soy de hule o lienzo barnizado de negro) y, la más de las veces, soy de madera pintada. A comienzos de este siglo muchas aulas estaban rodeadas por hermanos míos. Es decir, no ocupaba solamente el lugar de privilegio al frente de la clase, sino que también ocupábamos las paredes laterales del aula. ¿Para qué tantos pizarrones? Los nuevos tiempos exigían bastante trabajo de los chicos y mayor actividad del alumno. Para eso yo era una herramienta fundamental, y tenerlos ocupados en prácticas de cuentas o dictados a muchos alumnos a la vez, era una costumbre muy frecuente, ya que en los laterales de las aulas podían ubicarse muchos chicos que practicaran dictados, multiplicaciones o divisiones por tres cifras. Lo que fuera... Y aquí me ven, todavía disfruto de buena salud. ¿Que la tecnología me puede desplazar? No lo creo. Ahí tienen, para botón de muestra, a mis sobrinos electrónicos. A mis primos de fórmica, para que las tizas descansen un poco y para que trabajen los plumones. Allí andan dando vueltas otros que permiten tener copia en papel de lo que se ha escrito sobre ellos. ¿Tizas digitales? ¿Encerados de vidrio? Quién sabe. Hacia allá vamos. Nosotros somos lo de menos porque... ojo... lo que es ¡reemplazable es quien escribe sobre nosotros. Aquí no pueden faltar alumnos. Y.. por más que algún tecnólogo quiera reemplazarlos, no pueden faltar los docentes. De ellos, 0 por ellos y para ellos es todo nuestro trabajo. Nosotros somos testigos mudos de lo que ellos hacen. No tenemos palabras ni ideas. No somos el centro de sus universos. Lo son ellos. Por más chips y pantallas de cristal líquido que nos instalen. Lo más importante seguirá siendo el color de sus sueños sobre cualquiera de nosotros. Y esos sueños brillan tanto sobre una pizarra descascarado como sobre un monitor de última generación. No habrá corazón digital que lo reemplace.
jueves, 29 de octubre de 2009
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Acá les dejo tres links en los que se pueden encontrar cursos por Internet y comprar por Internet tecnología educativa.
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Las escuelas y la enseñanza en la sociedad de la información. José Manuel Pérez Tornero
Los centros de enseñanza han soportado la presión del cambio con crisis y contradicciones: reformas, malestar docente, insuficiencia de recursos, desmotivación de los estudiantes, desorientación, incertidumbre...Considerada desde una perspectiva global, la tecnología ha influido en esta situación más por los efectos que ha generado en el contexto general que por su propia incidencia en el interior de los centros educativos.
De hecho, las escuelas tal vez no utilicen todavía cotidianamente ni la televisión , ni el video, ni los ordenadores, ni Internet, ni otros muchos sistemas técnicos –su historia esta plena de avances tecnológicos que son enormes dificultades se incorporan a su evolución ,y, cuando lo hacen, su influencia es apenas superficial-.Pero los niños y niñas, y los jóvenes que asisten a ella- sobre todo en los países desarrollado-,tienen en sus hogares cada vez mas cadenas de televisión , mas videos , mas videojuegos, mas ordenadores, correo electrónico y accesos a Internet. La escuela tiende a ser refractaria a la incorporación de nuevas tecnologías y suele cerrársele sus puertas, pero estas acaban entrando indirectamente por la ventana.
A medida que la tecnología permitió aumentar la capacidad de multiplicar textos. El papel de la escuela se iba ensanchando y adquiriendo paulatinamente una función universalizadora.
Progresivamente, en un movimiento continuo que va desde la invención de la imprenta, la aparición del telégrafo la radio ,el cine, la televisión y la telemática, hasta Internet, que llevaron a fundar la escuela sufrieron una extraordinaria mutación. Es el momento en que la tradición escolar empieza a vivir en asedio de un nuevo mundo y a perder la autonomía relativa que, de un modo u otro, había mantenido por mucho tiempo.
Las grandes transformaciones
on la aparición de la sociedad de la información, las fuentes del saber se multiplican, se expanden y se difunden .Los libros ya no escasean sino que pueden multiplicarse por cientos de miles. Los medios audiovisuales difunden la información a la velocidad de la luz y la hacen crecer exponencialmente. Los ordenadores y las bases de datos acumulan, son dificultades, mas información y poseen una calidad de acceso nunca antes conocida en la historia. Internet, en el inicio del siglo XXI, esta siendo accesibles a todos ,casi sin limitaciones ,saberes y documentos en cualquier lugar del globo.
Las escuelas y universidades ya no son los únicos centros de la racionalidad y del progreso científico o social, ni los únicos que controlan la distribución del saber social.
Su crecimiento continuo y su perenne ocupación del espacio-tiempo social, han venido a configurar un nuevo clima cognoscitivo y de aprendizaje y, sobre todo, un nuevo territorio que la escuela ya no puede acotar. La probabilidad de que estos valores y pautas de comportamiento coincidan con los de la escuela empieza a ser remota; incluso en algunas ocasiones se presentan evidentes síntomas de una divergencia profunda.
La capacidad de la escuela de mantener a los niños en un ámbito controlado de educación y aprendizaje resistente al mundo exterior ha declinado mucho. Ha caído en amplio desuso en este cambio de siglo: un síntoma de que, desde la escuela, ya no es posible garantizar ambientes controlados para el aprendizaje. Son, en cambio, los media los que progresivamente se encargan de proporcionar la argamasa que requiere el tejido social contemporáneo lo hacen de manera que, en cierto modo, tiende a la totalización.
En paralelo, las familias, también, han perdido esa posibilidad, antes real, de controlar los ambientes de aprendizaje. La televisión y otros medios, no solo representan puntos de fuga importantísimos, sino que también, en muchas ocasiones ,sirven para poner de relieve que el discurso de los padres y tutores. Mientras los adultos se pretenden honestos, cariñosos, sensatos, la televisión muestra como se mienten ,se roban ,se emborrachan, y maltratan.
El asedio de la enseñanza tradicional
Estamos viviendo una transformación tan seria de la educación que los pilares que sostenían su autonomía escolar y sobre la cual fundaba su influencia social parecen derrumbarse a ojos de vista. Desde la televisión escolar hasta Internet están penetrando en los centros educativos creando nuevos ambientes de percepción y construcción del conocimiento.
Un esquema de la situación
De hecho, las escuelas tal vez no utilicen todavía cotidianamente ni la televisión , ni el video, ni los ordenadores, ni Internet, ni otros muchos sistemas técnicos –su historia esta plena de avances tecnológicos que son enormes dificultades se incorporan a su evolución ,y, cuando lo hacen, su influencia es apenas superficial-.Pero los niños y niñas, y los jóvenes que asisten a ella- sobre todo en los países desarrollado-,tienen en sus hogares cada vez mas cadenas de televisión , mas videos , mas videojuegos, mas ordenadores, correo electrónico y accesos a Internet. La escuela tiende a ser refractaria a la incorporación de nuevas tecnologías y suele cerrársele sus puertas, pero estas acaban entrando indirectamente por la ventana.
A medida que la tecnología permitió aumentar la capacidad de multiplicar textos. El papel de la escuela se iba ensanchando y adquiriendo paulatinamente una función universalizadora.
Progresivamente, en un movimiento continuo que va desde la invención de la imprenta, la aparición del telégrafo la radio ,el cine, la televisión y la telemática, hasta Internet, que llevaron a fundar la escuela sufrieron una extraordinaria mutación. Es el momento en que la tradición escolar empieza a vivir en asedio de un nuevo mundo y a perder la autonomía relativa que, de un modo u otro, había mantenido por mucho tiempo.
Las grandes transformaciones
on la aparición de la sociedad de la información, las fuentes del saber se multiplican, se expanden y se difunden .Los libros ya no escasean sino que pueden multiplicarse por cientos de miles. Los medios audiovisuales difunden la información a la velocidad de la luz y la hacen crecer exponencialmente. Los ordenadores y las bases de datos acumulan, son dificultades, mas información y poseen una calidad de acceso nunca antes conocida en la historia. Internet, en el inicio del siglo XXI, esta siendo accesibles a todos ,casi sin limitaciones ,saberes y documentos en cualquier lugar del globo.
Las escuelas y universidades ya no son los únicos centros de la racionalidad y del progreso científico o social, ni los únicos que controlan la distribución del saber social.
Su crecimiento continuo y su perenne ocupación del espacio-tiempo social, han venido a configurar un nuevo clima cognoscitivo y de aprendizaje y, sobre todo, un nuevo territorio que la escuela ya no puede acotar. La probabilidad de que estos valores y pautas de comportamiento coincidan con los de la escuela empieza a ser remota; incluso en algunas ocasiones se presentan evidentes síntomas de una divergencia profunda.
La capacidad de la escuela de mantener a los niños en un ámbito controlado de educación y aprendizaje resistente al mundo exterior ha declinado mucho. Ha caído en amplio desuso en este cambio de siglo: un síntoma de que, desde la escuela, ya no es posible garantizar ambientes controlados para el aprendizaje. Son, en cambio, los media los que progresivamente se encargan de proporcionar la argamasa que requiere el tejido social contemporáneo lo hacen de manera que, en cierto modo, tiende a la totalización.
En paralelo, las familias, también, han perdido esa posibilidad, antes real, de controlar los ambientes de aprendizaje. La televisión y otros medios, no solo representan puntos de fuga importantísimos, sino que también, en muchas ocasiones ,sirven para poner de relieve que el discurso de los padres y tutores. Mientras los adultos se pretenden honestos, cariñosos, sensatos, la televisión muestra como se mienten ,se roban ,se emborrachan, y maltratan.
El asedio de la enseñanza tradicional
Estamos viviendo una transformación tan seria de la educación que los pilares que sostenían su autonomía escolar y sobre la cual fundaba su influencia social parecen derrumbarse a ojos de vista. Desde la televisión escolar hasta Internet están penetrando en los centros educativos creando nuevos ambientes de percepción y construcción del conocimiento.
Un esquema de la situación
- La escuela ya no es la depositaria privilegiada del saber, o, al menos, no es del saber socialmente relevante.
- Las escuelas tampoco son los ámbitos privilegiados de transmisión de la educación.
- La escuela, sigue siendo, igualmente, la institución más eficaz para la enseñanza de la lectoescritura.
- Los maestros ya no son considerados los que atesoran todas las habilidades y sabidurias.
- Las escuelas ya no disponen, de los únicos instrumentos para la producción y sistematización del saber
- La escuela se ha vuelto un elemento poco práctico
- La escuela está perdiendo el poder que le habñia dado el sistema tradicional
Apuestas por la renovación
- La apertura sistemática de las escuelas a nuevas fuentes de saber
- La conversion de las escuelas en espacios de exploracion, de descubrimiento y de invención
- La participacion de la comunidad entera en la educacion
- La aceptacion de la necesidad de potenciar el tipo de alfabetizacion propio de la sociedad de la información.
- La creación de nuevas comunidades educativas
- La superacion del modelo fabril
- La renovacion tecnológica
- La redefinición del rol del profesorado
- La redefinición del rol de Estado en la educacion
- La aceptación del principio de educación a lo largo de la vida
Sin lugar a dudas, si se presta atención a estos consejos y se le da lugar a las tecnologías en las escuelas, la deserción escolar no va a ser tan alta, y los alumnos no van a sentir que es en vano ir a la escuela. Se les debe dar lugar a las tecnologías y los docentes deben saber cuando, cómo y por qué utilizarlas, porque tampoco es el hecho de por ser "tecnológicos" las usamos porque sí y en cualquier ocasión. Su uso debe tener por fin lograr el mayor desarrollo cognitivo del alumno y a su vez que no se pierda su atención.
Las diversas influencias de la tecnología en el desarrollo de la mente. Gavriel Salomon
Un “marco de pensamiento” es una “representación cuya intención es guiar el proceso de pensamiento apoyando, organizando y catalizando dicho proceso” (Perkins).
“Los marcos de pensamiento implican elementos tales como las estrategias de pensamiento y de aprendizaje, el uso de lo metacognitivo, las manera de ver el mundo y el dominio de determinadas habilidades de procesamiento” (Resnick).
Pienso que no puede haber un solo mecanismo que dé cuenta de los efectos de la tecnología sobre la mente. Depende mucho de la naturaleza de la tecnología de las clases de efectos que potencialmente pueda tener, de las circunstancias sociales y psicológicas en las cuales esa tecnología se encuentra, así como del marco cognitivo individual.
Nos plantearemos cinco clases de efectos: a) La creación de metáforas a través de las cuales se examinan e interpretan los fenómenos, b) la estimulación con la consecuente creación de nuevas cognitivas, c) la potenciación de la actividad intelectual, d) la potenciación de algunas habilidades específicas y la parcial extensión de otras; y e) la internacionalización de modos y herramientas simbólicas tecnológicas que sirven como herramientas cognitivas.
Tecnologías de definición: La creación de metáforas.
Este tipo de efecto no se refiere a la tecnología en sí misma, pero influye en la forma en que el individuo percibe el mundo.
La tecnología estimula la mente de un individuo para crear la metáfora y ésta, a su vez, se convierte en lo que Sperber (1984) llama una <>, que es adoptada por una gran cantidad de individuos. Estos individuos no tienen por qué estar en contacto diario con dicha tecnología para adoptarla, pero deben formar parte de una comunidad que frecuentemente emplee esa metáfora. ¿Por qué los individuos la adoptan? Lakoff y Johnson (1981) sugieren que las metáforas son necesarias para entender la mayor parte de lo que sucede en nuestro mundo ya que concretizan y simplifican fenómenos abstractos y complejos.
Las metáforas también funcionan como reorganizaciones del conocimiento ya adquirido. Y como consecuencia para reinterpretarlo.
La tecnología no es por supuesto, la única fuente de metáforas culturalmente compartidas e individualmente utilizadas. Una metáfora para que sirva como herramienta cognitiva útil y no sólo como un símbolo verbal, debe implicar una cierta dosis de novedad y de sorpresa. La tecnología ofrece esta dosis.
En resumen, las tecnologías novedosas, hacen que algunos individuos las usen como metáforas para describir y explicar los fenómenos diarios.
Tecnologías que crean nuevas diferenciaciones.
La separación y la diferenciación entre lo que se ve <> y la manera que se interpreta, es la base fundamental de la ciencia moderna.
Ejemplos: La televisión, parece estimular en los niños la capacidad de diferenciación entre lo que real y lo que no lo es (Kelly, 1981).
Tukle (1984) describe cómo niños discutían si las computadoras tenían vida y eran capaces de hacer trampa en el juego. Nuevas diferenciaciones aparecen: que hacer trampa implica intencionalidad.
La tecnología estimula, y requiere la creación de nuevas diferenciaciones. Algunas de ellas se vuelven compartidas culturalmente, y otras en cambio, son el resultado del contacto directo del individuo con la tecnología. Tal como sucede con las metáforas, la creación de nuevas diferenciaciones no altera demasiado nuestra capacidad y habilidades cognitivas, pero sí influye en la manera de percibir el mundo. Cuando la tecnología se da por sobreentendida, ninguna nueva diferenciación puede aparecer y el individuo puede utilizarla sin prestarle demasiada atención.
Tecnologías que potencian por asociación.
Se puede decir que el poder real de la tecnología radica en su capacidad de redefinir y reestructurar de forma fundamental lo que hacemos, cómo lo hacemos, y cuándo lo hacemos. Llegamos a usar esta tecnología como una herramienta para pensar.
¿Dónde reside la inteligencia? Se podría argumentar, con un espíritu bruneriano, que la <> (Pea, 1985).
Los efectos de la tecnología sobre las habilidades cognitivas.
No del aprendizaje de tecnologías específicas sino del cultivo de habilidades transferibles que se utilizan durante la asociación con la tecnología. Por ejemplo, tanto la imprenta y la alfabetización que se produce a consecuencia de la misma, se consideraban como un apoyo para cultivar el pensamiento abstracto, y la televisión se consideraba como un elemento que impedía el desarrollo de la imaginación de los niños (Singer y Singer, 1981)
¿Qué tipo de asociación desarrolla habilidades transferibles?
El cultivo de habilidades es adquirido por experiencia directa. Además, la tecnología debe demandar del individuo un desarrollo mayor de las habilidades que ya posea en el momento de enfrentarse con la tecnología.
Perkins y Salomon (1987) desarrollaron una <>. Según esta teoría, tanto el aprendizaje como la transferencia pueden darse por dos caminos diferentes o por una combinación de los mismos. Un camino que hemos denominado, la <> se caracteriza por la práctica insistente de una actividad en distintas situaciones lo que conduciría a un dominio casi automático (y por lo tanto poco comprometido mentalmente) de los elementos cognitivos, habilidades o conductas adquiridas. Dichos elementos se aplicarán sin consciencia de la aplicación a situaciones nuevas que se parezcan a las situaciones ya practicadas.
El otro camino, denominado la <> está acompañado por un gran compromiso mental del individuo. Por <>, queremos decir: el empleo de las operaciones mentales no de forma automática sino metacognitivamente, guiadas, deliberadas y enfocadas hacia la realización de una tarea. (Salomon y Globerson, 1987).
La primera es importante durante el proceso de culturización, de formación de hábitos, de socialización, para establecer la imagen de uno mismo. Por otra parte, conocimientos y habilidades que sí tienen una disciplina, es decir, la educación, está diseñada para mover al educando hacia la <>.
Acerca de la internalización.
El concepto de internalización, parecería implicar el establecimiento debido a algún proceso de una representación mental o de un conjunto de procesos internos, que sirven como contrapartida de los sistemas de símbolos, procesos y herramientas comunicativas externas.
Los candidatos para la internalización.
No todos los elementos de nuestra interacción social o en nuestra interacción con una herramienta computerizada, será un candidato razonable para la internalización. Para ser un candidato, hay un número de condiciones que deben ser cubiertas. Debe provenir de la misma, o ser de similar <> que lo que en ese momento la mente esté usando y manipulando. Además, los modos simbólicos, las operaciones y las metaoperaciones a las que se enfrenta el individuo en su interacción con la tecnología para que puedan convertirse en herramientas cognitivas, deben ser tales que puedan ser potencialmente reconstruidas y realizadas en la mente del que está aprendiendo. Deben ser por lo tanto, congruentes con su nivel de conocimiento, sus intenciones y sus capacidades (Salomon y Globerson).
Otra condición es que el candidato para la internalización sea tal que el sujeto pueda asimilarlo a un esquema ya existente.
Ciertamente, otra condición importante es que una herramienta que sea candidata para internalización, debe mostrar la actividad que desarrolla para que el usuario pueda copiar el procedimiento y pueda reconstruirlo en su mente.
Las condiciones para la internalización.
Hay condiciones obvias que deben ser cubiertas, tales como la interacción activa y el control del educando. Los educandos pueden ni siquiera ser conscientes del hecho de que han comenzado a utilizar inteligencia artificial en su modo de pensar.
Sin embargo, tenemos buenas razones para creer que cuando los usuarios de una herramienta computerizada, o de un modo de representación, son conscientes de su naturaleza y de sus funciones, y están atentos y controlados tienen más posibilidades de reconstruirlas en su propio repertorio cognitivo y de usarlas como herramientas cognitivas (Salomon, 1979).
¿Cuán profundos y cognitivamente significativos son los efectos cognitivos de la tecnología? Uno podría hablar de dos niveles de efectos. Estos han sido denominados por Perkins (1985) <>. Los efectos yema-de-los-dedos-de-primer-orden, incluyen las capacidades más directas producidas por el contacto con la tecnología: mayor movimiento, computarización más sencilla, comunicación más rápida, un acceso más amplio y sencillo a un cuerpo de información mejor organizado. Los efecto-de-yema-de-los-dedos-de-segundo-orden, en cambio, incluyen efectos <>
Considerando que los efectos de yema-de-los-dedos-de-segundo-grado, existen potencialmente en la tecnología, podemos contestar la pregunta acerca de los efectos, diciendo que éstos dependerán menos de la tecnología que de los individuos que la usan en un determinado contexto social. Mucho dependerá de la atención que haya prestado el individuo (Salomon y Globerson, 1987) al usar la tecnología y los desafíos cognitivos por ésta planteados.
Supongamos que los efectos en consideración son <> y duraderos, ¿cómo se relacionará con el desarrollo cognitivo? Si lo miramos desde un punto de vista vygotskiano o bruneriano, los efectos de la tecnología no determinarían el curso del desarrollo, pero sí realizarían su potencial a través de la internalización de medios representacionales y herramientas que flexibilizan los elementos cognitivos.
En mi opinión hay tecnologías y tecnologías... Hay muchas que verdaderamente nos ayudan a desarrollar la mente y nos crean nuevas habilidades que luego nosotros utilizaremos en otros ambitos. Pero también estan aquellas que nos facilitan demasiado las cosas, y hasta se podría decir piensan por nosotros. Por eso es importante saber cómo utilizarlas, cuándo y de qué modo. Saber encontrarle el fin y la manera de que verdaderamente potencie nuestras destrezas.
“Los marcos de pensamiento implican elementos tales como las estrategias de pensamiento y de aprendizaje, el uso de lo metacognitivo, las manera de ver el mundo y el dominio de determinadas habilidades de procesamiento” (Resnick).
Pienso que no puede haber un solo mecanismo que dé cuenta de los efectos de la tecnología sobre la mente. Depende mucho de la naturaleza de la tecnología de las clases de efectos que potencialmente pueda tener, de las circunstancias sociales y psicológicas en las cuales esa tecnología se encuentra, así como del marco cognitivo individual.
Nos plantearemos cinco clases de efectos: a) La creación de metáforas a través de las cuales se examinan e interpretan los fenómenos, b) la estimulación con la consecuente creación de nuevas cognitivas, c) la potenciación de la actividad intelectual, d) la potenciación de algunas habilidades específicas y la parcial extensión de otras; y e) la internacionalización de modos y herramientas simbólicas tecnológicas que sirven como herramientas cognitivas.
Tecnologías de definición: La creación de metáforas.
Este tipo de efecto no se refiere a la tecnología en sí misma, pero influye en la forma en que el individuo percibe el mundo.
La tecnología estimula la mente de un individuo para crear la metáfora y ésta, a su vez, se convierte en lo que Sperber (1984) llama una <
Las metáforas también funcionan como reorganizaciones del conocimiento ya adquirido. Y como consecuencia para reinterpretarlo.
La tecnología no es por supuesto, la única fuente de metáforas culturalmente compartidas e individualmente utilizadas. Una metáfora para que sirva como herramienta cognitiva útil y no sólo como un símbolo verbal, debe implicar una cierta dosis de novedad y de sorpresa. La tecnología ofrece esta dosis.
En resumen, las tecnologías novedosas, hacen que algunos individuos las usen como metáforas para describir y explicar los fenómenos diarios.
Tecnologías que crean nuevas diferenciaciones.
La separación y la diferenciación entre lo que se ve <
Ejemplos: La televisión, parece estimular en los niños la capacidad de diferenciación entre lo que real y lo que no lo es (Kelly, 1981).
Tukle (1984) describe cómo niños discutían si las computadoras tenían vida y eran capaces de hacer trampa en el juego. Nuevas diferenciaciones aparecen: que hacer trampa implica intencionalidad.
La tecnología estimula, y requiere la creación de nuevas diferenciaciones. Algunas de ellas se vuelven compartidas culturalmente, y otras en cambio, son el resultado del contacto directo del individuo con la tecnología. Tal como sucede con las metáforas, la creación de nuevas diferenciaciones no altera demasiado nuestra capacidad y habilidades cognitivas, pero sí influye en la manera de percibir el mundo. Cuando la tecnología se da por sobreentendida, ninguna nueva diferenciación puede aparecer y el individuo puede utilizarla sin prestarle demasiada atención.
Tecnologías que potencian por asociación.
Se puede decir que el poder real de la tecnología radica en su capacidad de redefinir y reestructurar de forma fundamental lo que hacemos, cómo lo hacemos, y cuándo lo hacemos. Llegamos a usar esta tecnología como una herramienta para pensar.
¿Dónde reside la inteligencia? Se podría argumentar, con un espíritu bruneriano, que la <
Los efectos de la tecnología sobre las habilidades cognitivas.
No del aprendizaje de tecnologías específicas sino del cultivo de habilidades transferibles que se utilizan durante la asociación con la tecnología. Por ejemplo, tanto la imprenta y la alfabetización que se produce a consecuencia de la misma, se consideraban como un apoyo para cultivar el pensamiento abstracto, y la televisión se consideraba como un elemento que impedía el desarrollo de la imaginación de los niños (Singer y Singer, 1981)
¿Qué tipo de asociación desarrolla habilidades transferibles?
El cultivo de habilidades es adquirido por experiencia directa. Además, la tecnología debe demandar del individuo un desarrollo mayor de las habilidades que ya posea en el momento de enfrentarse con la tecnología.
Perkins y Salomon (1987) desarrollaron una <
El otro camino, denominado la <
La primera es importante durante el proceso de culturización, de formación de hábitos, de socialización, para establecer la imagen de uno mismo. Por otra parte, conocimientos y habilidades que sí tienen una disciplina, es decir, la educación, está diseñada para mover al educando hacia la <
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El concepto de internalización, parecería implicar el establecimiento debido a algún proceso de una representación mental o de un conjunto de procesos internos, que sirven como contrapartida de los sistemas de símbolos, procesos y herramientas comunicativas externas.
Los candidatos para la internalización.
No todos los elementos de nuestra interacción social o en nuestra interacción con una herramienta computerizada, será un candidato razonable para la internalización. Para ser un candidato, hay un número de condiciones que deben ser cubiertas. Debe provenir de la misma, o ser de similar <
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Ciertamente, otra condición importante es que una herramienta que sea candidata para internalización, debe mostrar la actividad que desarrolla para que el usuario pueda copiar el procedimiento y pueda reconstruirlo en su mente.
Las condiciones para la internalización.
Hay condiciones obvias que deben ser cubiertas, tales como la interacción activa y el control del educando. Los educandos pueden ni siquiera ser conscientes del hecho de que han comenzado a utilizar inteligencia artificial en su modo de pensar.
Sin embargo, tenemos buenas razones para creer que cuando los usuarios de una herramienta computerizada, o de un modo de representación, son conscientes de su naturaleza y de sus funciones, y están atentos y controlados tienen más posibilidades de reconstruirlas en su propio repertorio cognitivo y de usarlas como herramientas cognitivas (Salomon, 1979).
¿Cuán profundos y cognitivamente significativos son los efectos cognitivos de la tecnología? Uno podría hablar de dos niveles de efectos. Estos han sido denominados por Perkins (1985) <
Considerando que los efectos de yema-de-los-dedos-de-segundo-grado, existen potencialmente en la tecnología, podemos contestar la pregunta acerca de los efectos, diciendo que éstos dependerán menos de la tecnología que de los individuos que la usan en un determinado contexto social. Mucho dependerá de la atención que haya prestado el individuo (Salomon y Globerson, 1987) al usar la tecnología y los desafíos cognitivos por ésta planteados.
Supongamos que los efectos en consideración son <
En mi opinión hay tecnologías y tecnologías... Hay muchas que verdaderamente nos ayudan a desarrollar la mente y nos crean nuevas habilidades que luego nosotros utilizaremos en otros ambitos. Pero también estan aquellas que nos facilitan demasiado las cosas, y hasta se podría decir piensan por nosotros. Por eso es importante saber cómo utilizarlas, cuándo y de qué modo. Saber encontrarle el fin y la manera de que verdaderamente potencie nuestras destrezas.
Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información. Dr. Diego levis, Bs As, Marzo de 2004
Tras declarar el “deseo y compromiso comunes de construir una sociedad de la información centrada en la persona, incluyente y orientada al desarrollo, en la que todos puedan crear, consultar, utilizar y compartir la información y el conocimiento”, manifiestan que el “desafío es encauzar el potencial de la tecnología de la información y el comunicación para (…), erradicar la extrema pobreza y el hambre, lograr una educación primaria universal, promover la igualdad de género y la habilitación de las mujeres, reducir la mortalidad infantil, mejorar la salud materna, combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades, garantizar la sustentabilidad ambiental y forjar alianzas mundiales a favor del desarrollo para lograr un mundo más pacífico, justo y prospero” y expresan su convicción de que el progreso de las TIC “brinda oportunidades si precedentes para alcanzar los niveles más elevados de desarrollo”.
Primeros antecedentes.
Hace más de 50 años, Norbert Wiener, creador de la cibernética, anunciaba el advenimiento de una “sociedad de la información” cuya base organizativa, imaginaba, era la circulación sin trabas de la información. Peor Wiener advierte limitaciones en este nuevo modelo de sociedad: desigualdades de acceso a la información y su transformación en mercancía.
A comienzos de la década de 1970, grandes avances en el campo de las telecomunicaciones y la informática permitieron un incremento muy importante en la velocidad y la capacidad de procesamiento y transmisión de información, además en un significativo descenso de los costos económicos de equipos y operaciones.
Algunos autores comenzaban a hablar del paso de una economía basada en la producción de bienes a otra basada en los servicios y en el que la información, pronosticaban, será recurso principal y el motor de un sistema económico cada vez más global.
En este contexto algunos gobiernos de países económicamente más desarrollados comienzan a centrar su atención en las posibilidades de desarrollo económico que ofrece la informática, hasta entonces reservada casi exclusivamente a usos militares, científicos e institucionales.
El interés que existía en la época por analizar y evaluar las consecuencias sociales y económicas implícitas en la interrelación entre las telecomunicaciones y la informática da lugar a la redacción de informes y a numerosas reuniones organizadas por diferentes organismos internacionales.
En 1978 se da a conocer el informe Nora/Minc sobre La información de la sociedad. Los autores pronostican el desarrollo inmediato de “una informática de masas que invadirá toda la sociedad, como lo ha hecho la electricidad”.
El informe francés tuvo gran repercusión y la verdadera revolución informática, tiene su origen en ambientes contraculturales de las universidades californianas de Stanford y Berkeley a principios de la década de 1970. La computadora, comienza a aparecer como una herramienta de liberación y comunicación. Durante los años ochenta, algunos autores señalan que la influencia de las TIC sobre las condiciones y la organización de la vida cotidiana dependían, entre otras cosas, de los usos sociales, y no sólo de las innovaciones técnicas.
Tecno-culturas.
A lo largo de toda la década de 1980, se multiplican los estudios con cierta insistencia del proceso de convergencia entre la radiodifusión, las telecomunicaciones, la informática y la electrónica de consumo.
Los autores más optimistas presentaban la informática y las telecomunicaciones como un vehículo de progreso, democracia, cultura y libertad, que conduce a un aumento del tiempo libre y a una mejora de la calidad de vida: la llamada “cibercultura”. Los continuadores de la contracultura de los setenta, reivindican el carácter “libertario” de las redes y al igual que Wiener décadas antes, conciben la sociedad ideal como una sociedad en la que la información pueda circular sin ningún tipo de trabas. Una de las manifestaciones más conocidas de la cibercultura (y uno de sus orígenes) es la comunidad “hacker”.
Por la superautopista de Al Gore rumbo a la cumbre de Ginebra.
Bill Clinton y Al Gore en 1993 crearon un plan que imaginaba una red de información planetaria capaz de transmitir mensajes e imágenes a la velocidad de la luz desde la ciudad más grande a la aldea más pequeña. Para el cuál era indispensable construir una Infraestructura Global de Información, que reagrupará las redes de telecomunicaciones, las computadoras, los bancos de datos y la electrónica de consumo.
Casi contemporáneo al anuncio del plan, la Comisión de las Comunidades Europeas publica a finales de 1993 un Libro Blanco sobre Crecimiento, competitividad, empleo. Retos y pistas para entrar en siglo XXI. Afirma: “En la actualidad el mundo está asistiendo a una mutación cuyos efectos son comparables a los de la primera revolución industrial. Esta mutación se debe al desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación y afecta al conjunto de la organización social y a las relaciones.
A partir de la década de 1990, el rápido crecimiento del número de usuarios de Internet empezó a llamar la atención. Al cabo de poco tiempo, la red no comercial de tintes contraculturales empezó a tener fines básicamente mercantiles.
El Plan de Acción Europea 200. Una sociedad de la información para todos de junio de 200, sitúa entre sus objetivos principales estimular el uso de la red y facilitar el acceso rápido, barato y seguro de la misma.
Ese mismo años, apenas un mes después, tuvo lugar una cumbre del Grupo de los Ocho. El documento surgido de este encuentro con un motor de vital importancia para el crecimiento de la economía mundial.
Las TIC, añade el documento, representan una oportunidad extraordinaria para las economías emergentes y en desarrollo.
La celebración, en Ginebra, de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información (CMSI-WSIS) confirma: “Este proceso dinámico anuncia una cambio fundamental en todos los aspectos de nuestras vidas, incluyendo la difusión de los conocimientos, el comportamiento social, las prácticas económicas y empresariales, el compromiso político, los medios de comunicación, la educación y la salud, el ocio y el entretenimiento. Nos encontramos sin duda en medio de una gran revolución, tal vez la mayor que la humanidad haya experimentado.”
CMSI: ¿Cuáles sociedades de la información?
El informe Construir la sociedad europea de la información para todos, define la sociedad de la información como “aquella que actualmente se desarrolla, en la cual las tecnologías poco costosas de almacenaje y de transmisión de información y de datos son accesibles a todos. Esta está acompañada de innovaciones organizacionales, comerciales, sociales y jurídicas que cambiarán en profundidad la vida, tanto en el trabajo como en la sociedad en general”.
No es seguro que viviremos mejor por el sólo hecho de tener acceso a más imágines, más informaciones y más canales de comunicación.
Es probable que la misma heterogeneidad de los participantes de la Sociedad Civil haya dificultado la presentación de propuestas concretas capaces de impulsar acciones que faciliten el uso social y efectivo de las TIC para mejorar las condiciones de vida de las personas y el bienestar del conjunto de la sociedad.
Un camino por andar.
Cuando las palabras se repitan, se empieza a construir una visión cercana al mito.
Los documentos finales de la CMSI deja la falsa idea de que la solución a los desafíos a los que se enfrenta la humanidad pasa por eliminar la llamada brecha digital, como si esta fuera la causa y no consecuencia de la brecha económica y social que separa a los habitantes del mundo.
Sin lugar a dudas coincido con el autor en este último punto. Creen que lograr mejorar las comunicaciones y hacer que la información llegue a todos lados va a solucionar muchos problemas. Y sin embargo, está muy a la vista que este sólo aumenta la diferencia social, que esto sólo aleja más a la gente que no puede acceder a ella. Si bien facilitan muchas cosas, y eso no se puede negar, las TIC siguen siendo solo para unos pocos. Y la información que uno obtiene es nada más la que unos pocos quieren que sepamos.
Primeros antecedentes.
Hace más de 50 años, Norbert Wiener, creador de la cibernética, anunciaba el advenimiento de una “sociedad de la información” cuya base organizativa, imaginaba, era la circulación sin trabas de la información. Peor Wiener advierte limitaciones en este nuevo modelo de sociedad: desigualdades de acceso a la información y su transformación en mercancía.
A comienzos de la década de 1970, grandes avances en el campo de las telecomunicaciones y la informática permitieron un incremento muy importante en la velocidad y la capacidad de procesamiento y transmisión de información, además en un significativo descenso de los costos económicos de equipos y operaciones.
Algunos autores comenzaban a hablar del paso de una economía basada en la producción de bienes a otra basada en los servicios y en el que la información, pronosticaban, será recurso principal y el motor de un sistema económico cada vez más global.
En este contexto algunos gobiernos de países económicamente más desarrollados comienzan a centrar su atención en las posibilidades de desarrollo económico que ofrece la informática, hasta entonces reservada casi exclusivamente a usos militares, científicos e institucionales.
El interés que existía en la época por analizar y evaluar las consecuencias sociales y económicas implícitas en la interrelación entre las telecomunicaciones y la informática da lugar a la redacción de informes y a numerosas reuniones organizadas por diferentes organismos internacionales.
En 1978 se da a conocer el informe Nora/Minc sobre La información de la sociedad. Los autores pronostican el desarrollo inmediato de “una informática de masas que invadirá toda la sociedad, como lo ha hecho la electricidad”.
El informe francés tuvo gran repercusión y la verdadera revolución informática, tiene su origen en ambientes contraculturales de las universidades californianas de Stanford y Berkeley a principios de la década de 1970. La computadora, comienza a aparecer como una herramienta de liberación y comunicación. Durante los años ochenta, algunos autores señalan que la influencia de las TIC sobre las condiciones y la organización de la vida cotidiana dependían, entre otras cosas, de los usos sociales, y no sólo de las innovaciones técnicas.
Tecno-culturas.
A lo largo de toda la década de 1980, se multiplican los estudios con cierta insistencia del proceso de convergencia entre la radiodifusión, las telecomunicaciones, la informática y la electrónica de consumo.
Los autores más optimistas presentaban la informática y las telecomunicaciones como un vehículo de progreso, democracia, cultura y libertad, que conduce a un aumento del tiempo libre y a una mejora de la calidad de vida: la llamada “cibercultura”. Los continuadores de la contracultura de los setenta, reivindican el carácter “libertario” de las redes y al igual que Wiener décadas antes, conciben la sociedad ideal como una sociedad en la que la información pueda circular sin ningún tipo de trabas. Una de las manifestaciones más conocidas de la cibercultura (y uno de sus orígenes) es la comunidad “hacker”.
Por la superautopista de Al Gore rumbo a la cumbre de Ginebra.
Bill Clinton y Al Gore en 1993 crearon un plan que imaginaba una red de información planetaria capaz de transmitir mensajes e imágenes a la velocidad de la luz desde la ciudad más grande a la aldea más pequeña. Para el cuál era indispensable construir una Infraestructura Global de Información, que reagrupará las redes de telecomunicaciones, las computadoras, los bancos de datos y la electrónica de consumo.
Casi contemporáneo al anuncio del plan, la Comisión de las Comunidades Europeas publica a finales de 1993 un Libro Blanco sobre Crecimiento, competitividad, empleo. Retos y pistas para entrar en siglo XXI. Afirma: “En la actualidad el mundo está asistiendo a una mutación cuyos efectos son comparables a los de la primera revolución industrial. Esta mutación se debe al desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación y afecta al conjunto de la organización social y a las relaciones.
A partir de la década de 1990, el rápido crecimiento del número de usuarios de Internet empezó a llamar la atención. Al cabo de poco tiempo, la red no comercial de tintes contraculturales empezó a tener fines básicamente mercantiles.
El Plan de Acción Europea 200. Una sociedad de la información para todos de junio de 200, sitúa entre sus objetivos principales estimular el uso de la red y facilitar el acceso rápido, barato y seguro de la misma.
Ese mismo años, apenas un mes después, tuvo lugar una cumbre del Grupo de los Ocho. El documento surgido de este encuentro con un motor de vital importancia para el crecimiento de la economía mundial.
Las TIC, añade el documento, representan una oportunidad extraordinaria para las economías emergentes y en desarrollo.
La celebración, en Ginebra, de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información (CMSI-WSIS) confirma: “Este proceso dinámico anuncia una cambio fundamental en todos los aspectos de nuestras vidas, incluyendo la difusión de los conocimientos, el comportamiento social, las prácticas económicas y empresariales, el compromiso político, los medios de comunicación, la educación y la salud, el ocio y el entretenimiento. Nos encontramos sin duda en medio de una gran revolución, tal vez la mayor que la humanidad haya experimentado.”
CMSI: ¿Cuáles sociedades de la información?
El informe Construir la sociedad europea de la información para todos, define la sociedad de la información como “aquella que actualmente se desarrolla, en la cual las tecnologías poco costosas de almacenaje y de transmisión de información y de datos son accesibles a todos. Esta está acompañada de innovaciones organizacionales, comerciales, sociales y jurídicas que cambiarán en profundidad la vida, tanto en el trabajo como en la sociedad en general”.
No es seguro que viviremos mejor por el sólo hecho de tener acceso a más imágines, más informaciones y más canales de comunicación.
Es probable que la misma heterogeneidad de los participantes de la Sociedad Civil haya dificultado la presentación de propuestas concretas capaces de impulsar acciones que faciliten el uso social y efectivo de las TIC para mejorar las condiciones de vida de las personas y el bienestar del conjunto de la sociedad.
Un camino por andar.
Cuando las palabras se repitan, se empieza a construir una visión cercana al mito.
Los documentos finales de la CMSI deja la falsa idea de que la solución a los desafíos a los que se enfrenta la humanidad pasa por eliminar la llamada brecha digital, como si esta fuera la causa y no consecuencia de la brecha económica y social que separa a los habitantes del mundo.
Sin lugar a dudas coincido con el autor en este último punto. Creen que lograr mejorar las comunicaciones y hacer que la información llegue a todos lados va a solucionar muchos problemas. Y sin embargo, está muy a la vista que este sólo aumenta la diferencia social, que esto sólo aleja más a la gente que no puede acceder a ella. Si bien facilitan muchas cosas, y eso no se puede negar, las TIC siguen siendo solo para unos pocos. Y la información que uno obtiene es nada más la que unos pocos quieren que sepamos.
jueves, 15 de octubre de 2009
Conclusión personal
Los profesores son como ellos mismos se llaman inmigrantes tecnológicos. Pero todos han sabido adaptarse a las nuevas tecnologías, a su uso e interpretación.
Ninguno de ellos cree que estas tecnologías puedan llegar a reemplazar al maestro o a los libros, para ellos son solo una herramienta y un recurso. Saben utilizarlas y lo hacen en el caso que sean necesarias y de la forma que en verdad puedan llegar a beneficiar su labor docente.
Son consientes del avance que esta teniendo la tecnología en las actividades humanas y de la importancia que estas tienen en la vida cotidiana, y lo necesario que es su enseñanza e implementación.
La importancia de las tecnologías en el aula es cada vez mayor, y su uso inevitable, por ello los docentes recurren a ellas cada vez con mas frecuencia.
Ninguno de ellos cree que estas tecnologías puedan llegar a reemplazar al maestro o a los libros, para ellos son solo una herramienta y un recurso. Saben utilizarlas y lo hacen en el caso que sean necesarias y de la forma que en verdad puedan llegar a beneficiar su labor docente.
Son consientes del avance que esta teniendo la tecnología en las actividades humanas y de la importancia que estas tienen en la vida cotidiana, y lo necesario que es su enseñanza e implementación.
La importancia de las tecnologías en el aula es cada vez mayor, y su uso inevitable, por ello los docentes recurren a ellas cada vez con mas frecuencia.
Conclusión grupal.
Luego de realizar las encuestas a diferentes profesores del instituto llegamos a la conclusión que muchos de ellos nunca contaron con la ventaja de aprender a usar la computadora en la escuela. Para cuando vieron su primera computadora personal, ya se habían acostumbrado a usar, papel, lápiz y calculadora para realizar todas las tareas requeridas. Estaban habituados al entretenimiento que brindaba la radio y la televisión, y a la investigación en bibliotecas. En vez de resultarles un artículo práctico, la computadora se convertía en un aparato extraño y desconocido. De modo que suele ser bastante natural que, al principio, tiendan a acercárseles con temor y vacilación, y es por eso que a muchos de ellos les signifique un esfuerzo considerable tratar de integrarse a la cultura informática.
Hoy en día las utilizan como una herramienta más, no sólo en su vida personal si no que también pueden ayudar a integrar otros conocimientos en actividades educativas. Es por eso que se ve en el aula, como los maestros se esfuerzan por tener un nivel de excelencia en las nuevas tecnologías, ya que los alumnos han crecido con ellas y las manejan con fluidez y en muchos casos los alumnos saben más que el maestro en cuanto a éste tema.
Igualmente, no creen que estas tecnologías sean indispensables o vallan a suplantar a las herramientas clásicas de enseñanza como la tiza, el pizarrón o el libro. Sólo las ven como una ayuda más.
Realizada por: Amadeo, Marina
Farias, Belen
Perosic, Mariana
Viteri, Vanesa
Hoy en día las utilizan como una herramienta más, no sólo en su vida personal si no que también pueden ayudar a integrar otros conocimientos en actividades educativas. Es por eso que se ve en el aula, como los maestros se esfuerzan por tener un nivel de excelencia en las nuevas tecnologías, ya que los alumnos han crecido con ellas y las manejan con fluidez y en muchos casos los alumnos saben más que el maestro en cuanto a éste tema.
Igualmente, no creen que estas tecnologías sean indispensables o vallan a suplantar a las herramientas clásicas de enseñanza como la tiza, el pizarrón o el libro. Sólo las ven como una ayuda más.
Realizada por: Amadeo, Marina
Farias, Belen
Perosic, Mariana
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